Inauguro con este una serie de artículos que tengo la intención de publicar, de cuando en cuando (cada varios días, o varios años) hasta que alguien me pegue un tiro por uno de ellos.
Leo hoy en El Mundo (mi periódico favorito por su sexualidad compulsiva, o sea, por lo mucho que da por culo) que los profes se manifiestan contra los recortes de Aguirre en la CAM. Y veo una foto acompañando al artículo, en la que se puede leer una pancarta: «We (corazón) escuela pública».
Afortunadamente para los que aún creemos algo en los Reyes Magos, la escuela pública no es tan cateta, cutre e inculta como el que escribió la pancarta. Vamos a ver, hijo mío: ¿Se te ocurre alguna forma mejor de gritar a los cuatro vientos que ganas más que lo que vales como profe que ese exabrupto semibarbárico? Y, por otra parte, ¿alguien ha dicho algo en contra de la escuela pública? Creo que hasta ahora, lo único que se ha hablado es de que los profes, que están entre los mejor pagados del mundo se mire como se mire, curren un poco más. ¡Ni siquiera se ha hablado de ajustar sus salarios!
En fin. Seguimos siendo las dos Españas: A mí me parece mal todo lo que haga el vecino, pero de lo que hago mal yo, que ni se hable, ¿eh?. Que no vea el pronto que tengo cuando me cabreo.